Juan Manuel Ley López dejó un negocio de supermercados, conocido como Casa Ley, imbatible frente a sus competidores Wal-Mart, Soriana y Chedraui, a los que buscará quitarles consumidores a través de su expansión a todo México.
“En los estados del Pacífico y norte de México ni Wal-Mart ni Soriana han podido con nosotros”, asegura Sergio Ley López, uno de los accionistas y fundadores de Grupo Ley.
“Junto con toda la familia estamos invirtiendo en los supermercados y en otras áreas económicas en Sinaloa y en México”, señala Sergio Ley López, quien trabaja en el Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce) en convencer y mostrar las bondades de México a inversionistas asiáticos, especialmente chinos.
Casa Ley es considerada la quinta empresa de retail más importante en México. Juan Ley Fong regresó a Mazatlán en 1928, después de dejar toda una vida en China. Tres años después conoció a Rafaela López Trejo, con quien contrajo nupcias.
Durante la campaña en contra de inmigrantes en Sinaloa, Ley Fong escapó de la deportación al huir a Tayoltita, un pueblo localizado en la Sierra Madre.
Tayoltita era el centro mineral en Durango. En esa comunidad, Ley Fong encontró trabajo como hortelano de la empresa estadounidense San Luis Mining Company.
Ahí nacieron sus nueve hijos: 6 varones y 3 mujeres. Siendo el único chino en Tayoltita, los hijos fueron criados casi totalmente dentro de cultura mexicana.
El padre de los hermanos Ley López instaló un pequeño establecimiento, que se convirtió en la tienda del pueblo. Además se dedicaba a la compra de barras de oro y plata, que eran vendidas al Banco de México (Banxico).
En 1948, Juan Ley Fong sufrió la traición de un amigo cercano, quien se encargó de dejarlo en la ruina.
Ley Fong se enfrascó en una batalla por recuperar lo que le habían quitado, recorrió varias partes de México en busca de un lugar donde emprender una nueva empresa y ofrecerle a su familia una mejora económica. Durante 4 años, su hijo Juan Manuel Ley se hizo cargo del negocio en Tayoltita.
Para 1954, Ley Fong decidió que su familia se trasladara a Culiacán, Sinaloa. En esa metrópoli compró un modesto establecimiento situado en el viejo centro de Culiacán.
En septiembre de ese año nació la empresa Casa Ley. Los años pasaron, y ante la muerte del fundador de Casa Ley, su hijo Juan Manuel asumió el control el negocio familiar.
En esos años, los supermercados comenzaban a surgir en México, un modelo de negocio que no contaba con la aprobación de Ley Fong, quien decía que “carecían de un toque personal en el servicio”. Sin embargo, Juan Manuel tenía su propia opinión sobre los supermercados y en 1970 abrió el primero de Casa Ley en Culiacán.
Los socios de EU
La cadena creció lenta pero constantemente hasta que Juan Manuel, en un viaje por San Francisco, conoció a Peter Magowan, dueño de la cadena de supermercados de Safeway.
Los dos hombres hicieron amistad, y en 1981 Safeway compró 49% de Casa Ley. Con la llegada de recursos, la cadena entró en un periodo de extensión rápida por todas las ciudades del Pacífico y el norte de México.
Esa alianza entre el Chino Ley y Safeway se terminó en mayo de 2014, luego de que la Comisión Federal de Competencia Económica aceptó la salida del grupo estadounidense. Y a la vez llegó otra compañía de Estados Unidos.
Albertsons adquirió 49% las acciones pertenecientes a Safeway, así que se convirtió en el nuevo socio de Casa Ley. Este nuevo grupo empresarial tiene un alto peso en lo que hará la compañía de origen sinaloense en el negocio de retail en México.
Los nuevos socios de Ley operan tiendas de abarrotes en Estados Unidos bajo las marcas Acme Markets, Albertsons, Amigos, JewelOsco, Lucky, Market Street, Osco Pharmacy, Sav-on Pharmacy, Shaws, Star Maket y Super Saber Foods.