En la actualidad, los datos son quizá la moneda más valiosa en los negocios. El dominio de los grandes proveedores de energéticos, en aquel entonces era evidente. Hoy las cosas son muy diferentes y los datos se han convertido en el nuevo combustible que mueve los negocios dentro del sector empresarial.
Durante 2016, Apple (con un valor de 571.4 mmdd); Alphabet (530.6 mmdd);Amazon (362.4 mmdd), Exxon Mobil (356 mmdd) y Facebook (355.6 mmdd) se consolidaron como las organizaciones empresariales con mayor dominio de mercado.
No hay duda, el Big Data es el presente y futuro de las estrategias de negocio. Las grandes cantidades de datos entendidas cm recurso fundamental pr prefilar al mercado, ajustar estrategias y definir nuevas ventajas competitivas representa para las empresas nuevos espacios para hacer crecer su negocio. El 65 % de las empresas considera fundamental la implementación de estrategias de Big Data para subsistir en los años venideros, posicionamiento que tiene lógica si se considera que durante el año pasado el 72% de las organizaciones que implementaron soluciones de esta naturaleza aumentaron sus beneficios en un 8 % y redujeron sus pérdidas en un 10%.
Empresas de todos tamaños y categorías han destinado importantes esfuerzos en construir bases de datos sólidas, de gran tamaño y valor, que les permitan ser parte de las nuevas dinámicas impuestas por la economía de los datos.
Microsoft pago 196 dólares por acción, en una transacción valuada en 26 mil 200 millones de dólares, para convertirse en propietario de la red social profesional más grande del mundo: Linkedin. Las opciones y beneficios que representaba integrar las funciones de la red social a los productos existentes de Microsoft parecían no valer la inversión realizada. La confusión se mantuvo cuando Microsoft aclaraba que Linkedin sería operado como entidad independiente, bajo un modelo que emularía lo hecho con Youtube por Google o WhatsApp por Facebook.
Entonces ¿para que gastar más de 25 mil millones por una empresa que mantendría autonomía operativa y que no tenía planes de integrarse a otras soluciones existentes? El potencial de los datos contenida en el mayor archivo de profesionales y empresas a nivel mundial fue la gran apuesta. La adquisición debe ser vista como una compra estratégica cuyo fin es posicionar a Microsoft como una de las marcas pioneras en la economía de los datos.
De esta manera, el valor de las empresas así como de sus estrategias de negocios estará sujeto a la cantidad y calidad y calidad de datos que dispongan. Sin embargo, esto sólo es una parte de la ecuación: en la economia de los datos, no basta con poseer bases inmensas de Big Data para ganar ser digno rival. La selección, análisis e interpretación de los mismos es lo que marcará l adiferencia entre empresas exitosas y compañias sólo existentes, en donde el punto de quiebre está en satisfacer las exigencias de personalización que demanda el mercado, asunto crucial para mantener la rentabilidad del cualquier negocio.
Walmart, minorista que después de realizar un análisis semántico de texto en los buscadores de su tienda online mediante grandes cantidades de datos, logró entregar a sus visitantes resultados más relevantes adecuados a cada necesidad de consumo, hecho que se tradujo en incremento de conversión en una tienda online del 10 %. Son pocas las organizaciones que tienen certeza sobre qué es, cómo se gestiona y qué beneficios tangibles pueden entregar las soluciones relacionadas con Big Data.
Es un hecho que el 33% de los profesionales del sector aseguran sentirse abrumados por la cantidad de información y herramientas tecnológicas disponibles, mientras que solo 29% de los mismos afirma tener herramientas capaces de integrar la recolección de datos con estrategias de negocio reales.
El fenómeno tiene dos consecuencias inmediatas. Por un lado, ante la poca claridad en la entrega de retornos de inversión precisos, se prevé un descenso en el interés de las organizaciones por invertir en este terreno. En otras palabras, las compañías están determinando niveles de madurez inexistentes en un sector que apenas se encuentra en las primeras etapas de desarrollo.
La velocidad con la que se desarrolla el mercado de los datos y la poca vigencia de los mismos impulsarán la demanda generalizada de soluciones, capital humano y recursos capaces de no sólo recolectar, sino también analizar e interpretar los datos con mayor velocidad para encontrar insights de negocio con la capacidad de convertirse en ventajas competitivas a futuro.
El trafico mundial de datos móviles proveniente de dispositivos portátiles conectados a la red- desde relojes inteligentes hasta heads-up displays,por ejemplo- alcanzó los 15 petabytes mensuales durante 2014, cantidad que durante 2018 llegara a los 175 petabytes por mes.
El futuro del Big Data, y sus implicaciones para el sector empresarial son prometedores. No obstante, será un camino cerrado para pocas organizaciones, en donde sólo tendrán beneficios aquellas que encuentren la ruta para antes que recolectar datos, interpretarlos y convertirlos en información de valor. La verdadera batalla está por comenzar.
Fuente: Revista Merca 2.0