Para nadie es un secreto que la digitalización de muchas actividades así como de muchos objetos, trajo consigo una evolución importante del customer journey, dentro de la cual los cambios en la forma en la que los consumidor se relaciona con sus marcas en el punto de venta fue una de las más radicales.
En la visión del shopper, las líneas que distinguen el mundo online y offline cada vez son más difusas, por ejemplo, el 40 por ciento de los compradores inicia sus viajes de compra a partir de una consulta en un buscador en línea, mientras que el 29 por ciento de los mismos inicia su jornada mediante interacciones en plataformas social media. No obstante, el 95 por ciento de los cierres de esta se efectúan en una tienda física, según lo reportado por AT Kearney.
Para Fabián Ghirardelly, country manager de Kantar Worldpanel México, “los puntos de venta deben ser capaces de ajustarse a las particularidades de los mercados y en esa línea vemos hoy cambios importantes.(…) En los últimos años como algunos retailers han puesto en el mercado propuestas de valor interesantes para cautivar a un shopper más exigente, dispuesto a pagar por un mejor servicio o una mejor experiencia de compra”.
En buena medida, esto ha sido causa y consecuencia, de la creciente tendencia del e-commerce, forma de comercialización que para muchas firmas -sin importar su categoría- figura como el uno de los mejores canales para capitalizar los comportamientos de compra omnichannel del shopper.
Al respecto, datos de KPMG destaca que el 76 por ciento de los jugadores del sector retail ha generado ventas offline a partir de la actividad en su tienda en línea.
Dicho fenómeno, pone sobre la mira el rol que hoy juega la tienda física, discusión en la que teorías como su desaparición o su inminente traslado -en su totalidad- al ámbito digital, son recurrentes.
No obstante vemos como grandes minoristas que han nacido y se consolidan dentro del terreno online, hoy apuestan por establecer puntos de venta físicos como un paso más para garantizar sus oportunidades de crecimiento.
Pensar en la desaparición de las tiendas offline como consecuencia de la migración del consumo a plataformas online, será un error. Lo que es una realidad es que estos puntos de venta ‘tradicionales’ atraviesan por un proceso de reinvención, en donde el concepto per se de ‘tienda’ comienza a desdibujarse para dar paso al término ‘centros de experiencias’.
En la actualidad, los puntos de venta offline y online tiene que jugar de manera complementaria para lograr que la experiencia del cliente en cada viaje de compra se traduzca en una conversión desde cualquier plataforma, en función de las necesidades e intereses del shopper.