En un entorno competitivo y dinámico como el actual, las empresas necesitan más que nunca adaptarse a las exigencias del mercado de manera flexible y cada vez más eficiente. La tecnología es una herramienta fundamental en este camino, especialmente ahora que su uso se ha democratizado dejando de estar reservada a grandes compañías, con mucha capacidad de inversión.
Existen en el mercado muchas soluciones de aplicación de tecnología para las organizaciones, especialmente para aquellas del sector retail, pero despuntan las que además de facilitarle la gestión a las marcas y a sus trabajadores, ofrecen al cliente final una experiencia de compra diferencial, posicionando con ello la imagen de una compañía en torno a valores de innovación y calidad. Las etiquetas digitales, o spotlabel, son un claro ejemplo.
Se trata de una solución para la señalización de productos y campañas en pantallas de pequeño formato, 10 y 15 pulgadas, de una forma extremadamente ágil. El usuario administrador gestiona el catálogo de productos y campañas de forma centralizada desde una interfaz web. Por su lado, los usuarios gestores – generalmente empleados de las tiendas – podrán cargar la información de un producto del catálogo en una pantalla, simplemente leyendo el código de barras de la etiqueta desde su smartphone.
“Cuando decido poner un producto en rebajas, modifico su precio en el catálogo e inmediatamente se ve actualizado en todas las pantallas de mi red”. “Cambio los productos que están en pantalla con un solo click y sin posibilidad de equivocarme!” –Así de sencillo lo ven los usuarios actuales del servicio.
Destacan, además, cómo spotlabel les permite de forma adicional y sin dedicarle tiempo extra a la creación de contenidos, establecer un canal de comunicación dinámico con sus clientes, muy atractivo y distribuido por toda la tienda.
Además, en esta nueva era digital, los consumidores tienen mayor conciencia social y exigen productos y servicios amigables con el entorno En este sentido, spotlabel supone una mejora importante, ya que elimina el gasto en papel e impresión del etiquetado tradicional a la vez que reduce errores humanos en el proceso.
Optimiza la operación de tu layout, establece un canal de comunicación atractivo y une tu imagen de marca a valores de innovación y calidad.