Para anticipar el futuro las empresas de productos de consumo y tiendas retail no deben basar sus decisiones estratégicas sólo en los Millennials, sino en los hábitos y expectativas que muestra la llamada Generación Z (nacidos entre 1995 y 2010) a través de su vinculación con la tecnología móvil.
En la actualidad la Generación Z es la que está definiendo el futuro del consumo en el mundo, exigiendo que sus expectativas sean satisfechas a través de alternativas alineadas a su estilo de vida en el mundo físico y digital.