La gran distribución sigue acumulando servicios complementarios a la compra con el objetivo de reunir bajo un mismo techo las herramientas necesarias para satisfacer al cliente en su vida diaria. Si hace una semana Walmart celebraba su evento anual de chequeos médicos, ahora se atreve con los servicios legales.
Procesos como divorcios, contratos prematrimoniales, insolvencias, testamentos o servicios de inmigración pueden ser atendidos en las dependencias de Walmart a través de bufetes de abogados que se han instalado en el interior de sus tiendas.
La última firma legal en incorporarse a este mercado ha sido The Law Store, que ya cuenta con tres oficinas en sendos establecimientos del gigante estadounidense. “La gente va a Walmart”, reconoce el director ejecutivo del despacho de abogados, Kurt Benecke.
Esta firma vio la oportunidad de llegar a un mayor número de clientes cuando tuvo conocimiento de los planes de Walmart por ampliar los servicios que ofrece a sus compradores. “La actividad de la sociedad solía desarrollarse en el centro de las ciudades y sus inmediaciones, pero ahora es en Walmart”, destaca Benecke.
Pero no es éste el único despacho de abogados que tiene oficinas en las tiendas del retailer norteamericano. En 2012, la firma Kaine Law abrió su primera delegación en un Walmart de Atlanta y el año pasado puso en marcha dos dependencias más. Y no sólo en Estados Unidos, la compañía Axess Law opera en diez establecimientos de Walmart en Toronto (Canadá).
“Con el retail atraemos volumen. Conseguimos volumen de beneficios y tenemos flujo de trabajo eficiente”, señala Mark Morris, cofundador de Axess Law, al portal ABA Journal. Asegura que se decidieron por utilizar un método similar al empleado por contables, aseguradoras, agentes hipotecarios, dentistas y médicos: “nos involucramos en el retail”.